Es un hecho común que manejar una empresa no es nada fácil, ya que conlleva varias responsabilidades y la toma de varias decisiones importantes. Por eso, la gestión financiera es un proceso bastante útil, pues, ayuda a los empresarios a tener una mejor gestión del flujo de caja, y recursos financieros. Claro que, hay que saber cómo se desarrolla este proceso para emplearlo.
¿Qué es la gestión financiera?
Se puede ver la gestión financiera de dos maneras: cómo una actividad empresarial independiente, o cómo un mecanismo capaz de gestionar las actividades financieras de una empresa en el campo de producción material. Su utilización les permite a los empresarios usar distintas tareas de planificación, organización y control de las operaciones de una compañía, reduciendo sus costos y optimizando sus planes.
Cómo se puede suponer por su nombre, la aplicación de la gestión financiera se lleva a cabo en el mercado financiero, el cual se caracteriza por las relaciones económicas entre los compradores y vendedores de recursos financieros y valores de inversión.
¿Cuáles son las etapas de la gestión financiera?
Para que la gestión financiera se lleve a cabo de forma correcta necesita pasar por distintas etapas esenciales para completar un proceso. A continuación, vamos a analizar cada una de estas fases:
- Definir las necesidades: lo primero que una empresa debe hacer para realizar este proceso es estimar los recursos que posee, así cómo el presupuesto que necesita para sus operaciones futuras.
- Modo de financiamiento: se refiere a definir la estructura financiera de una empresa. En otras palabras, mostrará cuánto dinero toma de sus propios recursos para financiarse, y cuánto obtiene de fondos de terceros.
- Método de financiamiento: para este punto, la empresa debe elegir el método de financiamiento que vea más conveniente para sus operaciones, puede ser recurriendo a créditos bancarios, emitiendo bonos, captando el capital de nuevos socios, emitiendo acciones, etc.
- Administración de recursos: la empresa necesita empezar a distribuir sus recursos de la forma más prudente, cumpliendo sus obligaciones prioritarias con proveedores y empleados, al mismo tiempo que monitorea sus ratios financieros para medir ciertos indicadores.
- Evaluación de proyectos: para crear planes de inversión que le sean favorables, la empresa debe calcular su valor neto actual, en caso de no ser favorables económicamente, deberá desecharlos inmediatamente.
¿Cuáles son los objetivos de la gestión financiera?
Las personas que emplean una gestión financiera para su empresa esperan ciertos resultados específicos que le aseguren lograr ciertos objetivos, tales como:
Maximizar las ganancias
Si bien, el objetivo de cualquier actividad económica es la de ganar dinero, la gestión financiera permite maximizar los ingresos de una entidad tanto a corto plazo cómo a un periodo de tiempo más extenso, lo cual suele ser mucho más complejo debido a la impredictibilidad de los negocios.
Identificar las necesidades financieras
Tomando en cuenta la estructura de una empresa y los elementos que la componen, cómo su tecnología, número de colaboradores o su escala de operaciones, la gestión financiera permite estimar los requisitos económicos de una compañía y el dinero que necesita para que siga funcionando.
Mejorar la eficiencia de las operaciones
Con la gestión financiera, los empresarios pueden maximizar la eficiencia en su adquisición y uso de recursos, de forma que logren minimizar el desperdicio de sus recursos en las operaciones y actividades estratégicas, al mismo tiempo que crean mejores estrategias que ayuden a su compañía.